Liberación emocional de forma incontrolada y dañina.
La ira o un fuerte enfado o frustración que nos vamos guardando puede dar paso a dar patadas y puñetazos. Morder o insultar y gritar. Cara roja. Respiración rápida. Ojos y boca muy abiertos. Nuestro interior y pensamientos están muy agitados. Concentramos nuestros sentidos (vista, oido) en una persona u objeto al que atacar sin ver o escuchar nuestro alrededor.Puede ser una forma de defensa cuando nos han hecho mucho daño. Pero normalmente se controla para no hacer daño a otras personas o no romper cosas. Cuando tenemos este sentimiento perdemos parte del control sobre nuestras acciones. Nos cuesta escuchar . Toda nuestra energía y pensamientos están concentrados en hacer daño. Algunas personas son más propensas a sacar su violencia que otras ante los problemas de la vida. También existe gente con problemas que pueden llegar a disfrutar con la violencia.
Se puso muy violento cuando supo que le habían robado.
Le dio un empujón porque tenía prisa y no le dejaba pasar.
Iba a tirar el jarrón al suelo pero valía mucho dinero, respiró ondo y se tranquilizo para no romperlo.
Normalmente, no somos violentos y controlamos estas explosiones emocionales hablando o liberando nuestros enfados con gritos, deporte o relajación.
Uno se muestra o está hostil contra una persona o grupo. Porque siente o considera que le está perjudicando o puede ser contrario a sus deseos u opiniones.
Es una emoción propia de grupos: enemigos, paises, culturas. Se demuestra con acciones de gestos de ataque o aumento de gestos de defensa. Sería lo contrario a la hospitalidad.
El grupo de amigos se mostró hostil al nuevo grupo no dejando sitio para que entraran.
La columna del ejercito mostró sus armas en un gesto de hostilidad.
Se mostró hostil rechazando hablar del problema.
¡Atentos a gestos de hostilidad de un grupo, nos advierte de peligro!